Confieso, este es el primer Eurogame medio-duro (depende a quien preguntes te dirá que es más medio que duro, y al revés) al que juego. Con esto quiero decir que no tengo realmente con que comparar, conozco y he visto muchos, pero en mis carnes, este es el primero. Esta es la historia de como lo jugamos en la asociación Místicos de Arkat, y como nos quedamos tras ello.

Primeramente la explicación puede parecer abrumadora, hay muchas posibilidades y pequeñas cosas que se pueden hacer. Hay un porrón de iconos que de primeras asustan, pero en cuanto le coges el funcionamiento son muy claros e intuitivos. Por suerte teníamos a un experto y curtido «explicador» de juegos, que fue capaz de darnos a conocer todo en unos 30/40 minutos, y lo entendí hasta yo que soy bastante zoquete de primeras.

Lo que no vas ha dejar de hace en este juego son cosas, porque hay muchísimas posibilidades, el turno es muy corto, ya que te mueves (hasta tres espacios edificados en principio) y haces las acciones que hay en el edificio al que has llegado.

La historia del juego es interesante, eres un vaquero que tienes que llevar reses hasta Kansas City, y una vez allí enviarlas por tren a distintas ciudades hasta llegar a San Francisco. Las reses están representadas por un set de cartas en el que hay diferentes razas de las mimas, que claro esta, tienen un valor. De estas tendrás cuatro en mano (luego se puede aumentar hasta seis). Hay que procurar llegar a Kansas City con todas diferentes en tu mano, y del máximo valor posible, ya que las repetidas no contaran, y cuanto más valor tengan, mas cobraras y más lejos las podrás mandar.

Otra cosa básica (y que yo a penas utilice) es ir construyendo edificios propios, donde tienes la posibilidad de hacer acciones diferentes beneficiosas, abriendo las opciones exponencialmente, pudiendo conseguir más dinero, mejor ganado, más trabajadores, y en general más de todo.

Los trabajadores son otro factor importante, habiendo de tres tipos, el vaquero que te permitirá tener más y mejores cabezas de ganado, el «currela», bautizado como «el chino» en esta ocasión, que te permite construir más y mejores edificios, y el ingeniero, que hace que el tren avance más rápido.

Mover tu locomotora hace que te salga más económico viajar mas lejos (otra cosa en la que tarde darme cuneta, y me penalizo). Según llegas a más ciudades, tu zona personal de juego se va despejando y te permite todavia más opciones.

Yo de principio intente hacer muchos viajes, aunque no cargara muchas reses, pero me penalizaron el tener que llegar a ciudades cercanas, que al combinarlas me penalizaban. Cuando me di cuenta me lo tome con más calma, pero no construí edificios propios, y me valía principalmente de los comunes iniciales, lo cual a mitad de partida no es buen negocio, teniendo incluso que pagar algo a mis compañeros de mesa, con lo cual poco a poco los enriqueces.

Como buen novato en este tipo de juegos, aunque lo entendí perfectamente ya que no es complicado, peque de no hacer buenos combos, cuando hay varios muy jugosos. No puedes centrarte en una o dos cosas, tienes que ir haciendo un poquito de todo, y no descuidar ningún aspecto. Pero vamos que esto pasa en todos los juegos de este tipo.

Yo junte muchas vacas diferentes, y las lleve muy lejos, pero no conseguí puntos de victoria por muchos otros motivos, y al final quede muy atrás, y puntuando realmente poco. La medía dice que se hacen unos 90 puntos, y me quede en unos irrisorios 65.

A mi me ha gustado muchísimo, pese a la paliza que me lleve. En un par de horas lo has ventilado, tras la explicación. Te deja un gran sabor de boca, y con ganas de echar otra una vez que sabes para que sirve todo, o al menos parece que lo sabes.

Mecánicas pensadas al milímetro, que es lo que se busca en un euro, y este lo tiene. Un de los peros que se le puede poner es que si te quedas sin dinero, y pasas por edificios en los que tienes que pagar, no pagas y listo, no te penaliza en nada, se han tomado al pie de la letra lo de «el que da lo que tiene, no tiene que dar nada más».

Esto es una simple primera opinión, como se hace siempre en esta sección. Quedan por explicar algunas cosas en profundidad, pero a grandes rasgos esto es el juego. No podéis dejar de probarlo a poco que os gusten los eurogames, creo que poca gente de este perfil no quedara satisfecha. Tal ves la que venga con las expectativas por las nubes por el éxito en Essen 2016 y espere el juego definitivo, si dejas esto de lado, es un grandísimo juego.

Los dos compañeros de sesión, mucho más experimentados y curtidos que yo en este tipo de juegos, quedaron tremendamente satisfechos tambien. Evidentemente por el juego y no por ganarme, que es como pegar a un borracho, no tiene mérito.